Los presocráticos crearon una cierta ruptura en el conocimiento popular |
Los presocráticos representaron ciertamente una ruptura epistemológica y una irrupción filosófica en la antigua Grecia. Ellos estudiaron básicamente los elementos fundamentales de la naturaleza con el fin de poder determinar cual de ellos podía ser el principio primordial del cual se derivó todo lo demás que constituye el ser en su totalidad.
Los presocráticos crearon una cierta ruptura en el conocimiento popular ya que aquel se alimentaba únicamente del mito; ellos centraron su reflexión en la naturaleza y desde allí intentaron explicar el origen de todo lo que existe.
¿Qué buscaban los presocráticos?
los presocráticos buscaban el arjé o elemento último que pudiera dar sentido y unidad a todos los demás elementos que conforman el mundo, estos filósofos, amantes de la verdad y deseosos de explicar el todo, se caracterizaron por dejar a un lado las explicaciones míticas con las que la gente vulgar se conformaba. Es cierto que abandonaron muchas supersticiones, pero no es verdad que las superaron en su totalidad, el poder del mito es tan grande que no es fácil saltarlo completamente.
Tales de Mileto (624 a.C.-548 a.C.)
La propuesta de este filósofo es de naturaleza metafísica. |
De él no sabemos mucho.
Lo más conocido es su afirmación de que todo surge del agua💧. En
nuestra época esto le suena a cualquiera, incluso a un sujeto rústico,
como algo verdaderamente absurdo. Sin embargo, no pienso que lo sea
totalmente. Hoy día sabemos que el cuerpo humano está compuesto en más
de un 65% de agua y que el cerebro contiene más de 80 % de agua; Las
células que constituyen los cuerpos humanos tienen agua en demasía.
Por ese motivo, no se puede considerar totalmente gratuita la afirmación suya. Él sostuvo que de este elemento surgen todas las cosas y que, una vez terminado su ciclo vital, a él vuelven.
No es fácil precisar esta cita de Tales pues no se tiene mayor conocimiento del cuerpo teórico de este pensador, si se tuviera acceso a su sistema categorial completo aquella tesis sería fácilmente incluida y armonizada en el conjunto de proposiciones que constituyen su cuerpo teórico.
Inclusive Aristóteles, uno de los filósofos más grandes que ha existido, no pudo precisar el significado exacto de esta afirmación.
Su propuesta, por ser llamada naturalista, ha sido tildada por muchos como de científica, en el sentido moderno, porque toma como punto de partida el mundo natural, sin embargo eso no es del todo cierto. La propuesta de este filósofo es de naturaleza metafísica.
El científico, como hoy se le entiende, se limita a estudiar un ámbito o un sector específico del ser, no el ser en su totalidad, Tales por el contrario trató de explicar el ser en cuanto tal desde su categoría central, el agua.
Otra cosa por lo que es bastante conocido Tales es por haber expresado
que todo está lleno de dioses; y, por otro lado, que
los imanes tenían alma.
El hilozoísmo, fue una
doctrina con la que al parecer Tales suscribió. La materia no sólo es
activa, es en algún sentido algo viviente, un ser.
Desde nuestra época cientificista y superficial, es fácil desdeñar la
propuesta de este gran pensador, pero hay que tratar de situarse en el
contexto donde su existencia tuvo lugar, visto así lo suyo fue una
auténtica irrupción filosófica dentro de un espacio-tiempo dominado
ampliamente por los mitos y las supersticiones religiosas.
Anaximandro(610-545)
Éste pensador, metafísico asimismo, sostuvo que la propuesta de Tales de Mileto era demasiada limitada por el siguiente motivo: su principio fundamental o el arjé, sobre el cual pretendía cimentar toda su teoría, era un elemento demasiado determinado. Por lo tanto, sugirió que era de vital importancia proponer algo más abstracto. Para él, ese principio tenía que ser algo de naturaleza indeterminada. A eso lo llamó el Ápeiron.
Esto no es concreto, representa un cierto avance con respecto a tales de Mileto pues se acrecienta el nivel de abstracción. Este principio es algo caótico; una cosa indefinida, como no es nada, tiene la posibilidad de llegar a convertirse en todas las cosas.
Este principio no tiene límites, es, en potencia, todas las
cosas; lleva dentro de sí todos sus contrarios sin ser
necesariamente alguno de ellos. Debido a esto, estos contrarios tienen
su momento de primacía. Estos se hacen injusticia mutuamente; por
ejemplo, el frío le hace injusticia al calor y el amor al odio.
Anaxímenes (588-534)
Tanto Tales de Mileto como Anaximandro no prestaron la debida atención
al problema del cambio, sólo se limitaron exponer sus teorías y sus
principios esenciales, esto lo aprovechó
Anaxímenes quien propuso
otra teoría bastante curiosa que, vista someramente, parecería ser un
retroceso al avance que había realizado Anaximandro.
Éste interesante pensador
propuso que el elemento primario del cual se originó todas las cosas
que existen es
el aire, ese fue su arjé. Para que el aire se llegue a
convertir en todas las cosas se requiere de dos mecanismos: la
rarefacción y la condensación. Por el primero, el aire se convierte en
fuego, el cual es el elemento más ligero. Por el segundo mecanismo, el
aire que estaba caliente se enfría y se convierte en viento, nubes,
agua, tierra y piedra.
Pitágoras de Samos (569-475)
La influencia que este
filósofo tuvo en su tiempo y el influjo que causó en pensadores
posteriores es sorprendente, es enorme no sólo por su potente
pensamiento filosófico sino que además por su visión religiosa del
mundo;
su filosofía no se limitaba a una simple especulación teórica sino
que además consistía en una forma de vida, esto impactó de gran manera en muchos admiradores y seguidores.
Creó una suerte de orden religiosa.
Fundó la escuela de los pitagóricos. En dicha corriente, se llegó a mezclar groseramente lo filosófico con
la superstición religiosa. Sus normas eran muy estrictas. Y muchas de
ellas eran completamente absurdas.
Éstos filósofos, influidos por Pitágoras, llegaron a considerar que la realidad está compuesta en su totalidad por números. El Arjé o el principio fundamental de la realidad es básicamente el número. Creían, en todo caso, que existían números que eran superiores a otros. Algunos contrarios son lo par y lo impar, lo ilimitado y lo limitado, derecha e izquierda, varón y mujer, lo uno y lo múltiple, reposo y movimiento, recto y torcido, cuadrado y rectangular, luz y oscuridad.
Cabe mencionar que en dicha lista el primer elemento es siempre el perfecto y el segundo el imperfecto. Defendieron, por otro lado, la conocidísima tesis de la transmigración de las almas, la cual posteriormente se volverá pieza constitutiva del sistema teórico de Platón.
👉Te puede interesar: ¿Cuál es la auténtica felicidad según Platón?
Esta tesis, para decirlo en palabras sencillas,
defiende la idea de que el alma es inmortal y por lo tanto va
reencarnándose en distintos cuerpos que a su vez son una especie de
cárcel para ella.
Se piensa que Jenófanes de Colofón. Sostuvo que la tierra🌍 era el Arjé esto es bastante debatible pues no hay cierto acuerdo entre los estudiosos acerca de esto. Se cree que fue el maestro de Parménides, pero después de ciertas investigaciones se puede concluir que no es cierto.
Se dice además que quizá para él no había ningún elemento visible que
pudiera ser el arjé; este filósofo
fue bastante crítico con las concepciones religiosas de sus
contemporáneos. Criticó la forma vulgar de religión, para él dios no es ni figura ni cuerpo y no ha nacido como los demás
dioses
es eterno, inmóvil y todo poderoso.
Jenófanes, precisamente por su forma radical de concebir la realidad mundana, originó una polémica ciertamente significativa en relación al politeísmo y el pensamiento antropomórfico, que los griegos tenían de los dioses demasiada burda.
En consecuencia, hizo mofa de Hesíodo y Homero porque, a
su juicio, habían adjudicado a los dioses los peores defectos que
gobiernan en la conciencia de los hombres; su misión era suplantar esa
visión errada e inadecuada
de la idea de
dios; aquel es un dios único, indivisible, de naturaleza radicalmente
distinta a la humana;
su trabajo significó la primera defensa del monoteísmo.
Heráclito de Éfeso (540-480)
Su pensamiento es de una complejidad abrumadora y, por lo mismo, al
leerlo se generan ciertas dificultades para entender sus escritos, por
eso Aristóteles lo tildó de ser un filósofo "oscuro". Él
pensó que ese arjé al que otros filósofos prestaron tanta atención era
el fuego vivo, eterno e increado.
Todo lo que existe venía del fuego y a él volvería. El universo, según su visión filosófica, se destruía periódicamente en la conflagración universal. Su pensamiento fue bastante amplio, mucho más que el de los otros filósofos ya mencionados.
Una de sus doctrinas más conocidas es aquella en la que sostenía de qué
existe un logos universal que lo gobierna todo,
dicha tesis se volverá central en las coordenadas estoicas.
El fundamento de la
armonía que se ve en el mundo se debe a la lucha de los contrarios; esto
nunca desaparece, aunque dé la impresión que sí.
Ahora bien, su doctrina más famosa y conocida
es la del cambio o el flujo universal de todas las cosas.
Para él todo fluye. No niega totalmente la permanencia, pues la
lucha de los contrarios permanece en lo profundo intacta. Afirma el
cambio, pero también, en alguna medida, la permanencia.
Parménides de Elea(540-470)
Este filósofo fue un gran conservador. Afirmó que el cambio era imposible, la razón para sostener su argumento era la siguiente: para que el cambio se dé es ineludible el paso del ser al no ser. El calor del agua en un vaso, supone que ésta no existía antes de ser; el paso del no ser al ser es imposible; no se puede justificar teóricamente.
De la nada, del no ser, nada sale: el ser es y el no ser
no es. Lo que es no puede no ser, así que lo del cambio es una vil
mentira; para él, lo único que existe es el ser en cuanto a ser,
el intelecto nos fuerza a ver que lo único que existe es el ser
que es puro, increado, eterno, perfecto y esférico.
Todo lo demás que se experimenta en la vida cotidiana queda por completo reducida a una mera ilusión, una apariencia, una opinión, un espejismo generado por los sentidos. Existe una tensión entre la razón y los sentidos. El problema comenzado por Parménides, que representó un gran desafío al mundo filosófico, sólo pudo ser solucionado satisfactoriamente por Aristóteles con su doctrina sobre el acto y la potencia.
Parménides representó un callejón sin salida para la filosofía, su obra fue un monismo sumamente grosero; él irrumpió para destruir a las distintas tesis que pretendían demostrar que, a partir de un principio único, era posible explicar la multiplicidad .
De un principio o arjé no se puede, según esta opinión, derivar la
realidad en su multiplicidad. Él tuvo muchos discípulos, el más
conocido de ellos es Zenón de Elea. Él se dedicó a
reforzar la teoría de su maestro de la imposibilidad del cambio. Para
ello propuso varias paradojas.
Los pluralistas
Los pluralistas son los filósofos que creen que hay muchos principios o
arjés de los cuales surgen todas las cosas.
Empédocles
Aquel propuso que eran cuatro elementos: la tierra, el agua, el aire, y el fuego. Éstos, a su juicio, son las piezas constitutivas de todo lo real; el cambio surge o se da a partir de la combinación o separación de tales elementos; cada cosa los posee a todos pero en distintas proporciones; mas estos principios son inmóviles. Según Empédocles, existen dos fuerzas cómicas, personales y mecánicas en continua lucha: el amor y el odio.
El amor es una fuerza unitiva qué une a los distintos elementos en una totalidad, en cambio el odio es la fuerza disruptiva que los separa. El esfero es el reino del absoluto amor, aquí todos los elementos están unidos entre sí; es el reino absoluto del amor. Esta fase no dura mucho tiempo, ya que pronto se deja ver y sentir el odio más malévolo.
De la lucha de estos dos surge el mundo; el odio comienza a
conquistar el camino abriéndose paso entre la virtud,
hasta llegar a la
acosmía
y el reino absoluto del odio, pero llegado allí el amor volverá a
ganar terreno hasta volver a unir todo, esto se repite hasta el
infinito, es un proceso de nunca acabar.
Anaxágoras (500-428)
Para este pensador, en el principio todas las cosas que conforman el universo estaban juntas. El creía, contrario a los no pluralistas, en la existencia de infinitos principios llamados a veces semillas o cosas. Anaxágoras les dará un nombre, homeomeria. Para él, todo está en el todo, cada cosa tiene o contiene literalmente a todas las cosas del universo, eso sí en distintas proporciones.
Mi cabello, por ejemplo, contiene todas las cosas pero hay mayor
proporción de cabello. Siguió básicamente la línea de Parménides. Para
aquel, que cree que demostró que la generación es imposible pues de la
nada no puede salir algo, por lo tanto si algo existe hoy tuvo que haber
existido siempre, lo que hoy existe ha existido siempre aunque haya sido
mezclado con las otras cosas por tal razón no se vio forzado a explicar
lo que son los principios o arjés ya que ellos, en rigor, son
todas las cosas.
Pues bien, el problema básico que tenía que solucionar era el
siguiente: ¿Cómo es que se pasa del mundo caótico al mundo ordenado y
múltiple que se presenta a nuestro espíritu? Para solucionarlo propuso
una doctrina muy interesante: según esta visión,
creía en la posibilidad de la existencia de un intelecto de carácter
personal y trascendente el cual estaba separado de todas las cosas,
este Nous, de hecho, es el encargado del demiurgo de platón y del
primer motor inmóvil de Aristóteles.
El atomismo de Demócrito y Leucipo
Los Arjés son, por un lado, dos y, por el otro, son infinitos |
Éstos contrariaron abiertamente el pensamiento de Parménides y sostuvieron que los Arjés son, por un lado, dos, y, por el otro, son infinitos; son dos porque la realidad se constituye de dos principios fundamentales: lo lleno y lo vacío. Lo lleno representa al ser y lo vacío representa al no ser. Pero son infinitos porque en el ser existen infinitas formas de lo lleno, a saber, los átomos, los cuales tienen infinitas figuras.
En primer momento, estos átomos son dirigidos al azar, no existe una fuerza que los conduzca hacia algún fin específico, pero hay que precisar, es un movimiento necesario y determinista pues puede explicarse siempre por la ley de la causa y el efecto.
👉 Este artículo te puede interesar: ✍Confesiones de un espíritu del tercer mundo
Ahora bien, si se produce un choque entre átomos con figuras que no son
compatibles entonces se repelen, pero si son compatibles, entonces se
entrelazan. Hay que decirlo,
su misión fue bastante ambiciosa: reconciliar a Heráclito y
Parménides.
Sócrates (Atenas, 470-399)
Lo mataron por corromper o, mejor dicho, por enseñar a la juventud. |
Éste representó, en alguna manera, la superación de estas formas antiguas de filosofar. Lo suyo fue sumamente refrescante, fue una nueva forma de ver el mundo filosófico.
Él, antes de ser muy conocido, se acercó a la filosofía de la naturaleza de estos hombres ya citados en busca del Arjé o los principios que le explicaran satisfactoriamente el origen de todas las cosas, pero en vez de hallar respuestas concretas a su inquietud intelectual sólo encontró elucubraciones contradictorias entre sí lo cual imposibilitaba poder determinar cuál de ellas podía ser considerada como la correcta.
Por dicho motivo desistió de ese interés y se dedicó a investigar sobre el ser humano y su virtud, la instrucción de cómo se debería de vivir fue algo que estuvo muy presente en su obra, por eso es que es considerado como el padre de la ética y la filosofía política. Como se volvió bastante crítico con los sabiondos de su tiempo, fue asesinado; su fuerte crítica social a las diferentes estructuras de poder no fueron toleradas.
Lo mataron por corromper o, mejor dicho, por enseñar a la
juventud. En la filosofía lo suyo fue renovador, fue gracias a su forma de pensar
que apareció Platón y más tarde el gran Aristóteles. Pero él
en vez de dedicarse a un estudio de carácter naturalista, tomó como
centro el ser humano y sobre aquel reflexionó profundamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
chintoliano@gmail.com
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.